Señalan anomalías técnicas en licitación de vales federales de fin de año

La licitación pública nacional electrónica LA-06-400-006400001-N-19-2025, destinada al suministro de vales electrónicos de despensa para trabajadores federales, entró en su fase final este lunes 8 de diciembre, fecha prevista para la emisión del fallo. El proceso avanza bajo observaciones técnicas luego de que la plataforma Compras MX registró en ceros los campos obligatorios de la propuesta económica presentada por Servicios Broxel, S.A.P.I. de C.V.

De acuerdo con la información disponible, dicho registro en ceros ocurrió en los apartados correspondientes al precio unitario, importe sin impuestos e importe total, los cuales son campos obligatorios dentro del sistema y deben coincidir con la propuesta económica presentada en formato PDF.

Este año, el procedimiento consolidado convocado por la Secretaría de Hacienda introdujo cambios relevantes en su mecánica. La subasta inversa, utilizada desde hace seis años y que permitía mejorar ofertas en tiempo real, fue sustituida por un esquema de “oferta única”, donde cada participante puede presentar una sola propuesta económica en la plataforma sin posibilidad de modificarla posteriormente.

Además, la autoridad fijó un descuento inicial obligatorio del 2.75%, que redujo el monto base de 10 mil 337 millones 990 mil pesos a un “Precio Máximo de Referencia” de 10 mil 053 millones 695 mil pesos para este ejercicio.

Según los documentos consultados, únicamente dos empresas participaron en el procedimiento: Broxel, que presentó una oferta con un descuento del 3.01%, y Toka Internacional, que registró una rebaja del 2.84%. Sin embargo, el registro en ceros de los campos económicos por parte de Broxel generó observaciones técnicas entre participantes y especialistas del sector.

Una situación similar ya había ocurrido en un proceso consolidado previo, cuando un licitante fue declarado ganador pese a que los campos económicos obligatorios también aparecían en ceros. Ese antecedente, según fuentes del sector, generó dudas entre competidores sobre el criterio que aplicará la autoridad al momento de emitir el fallo de esta licitación.

Otro de los cambios relevantes para este año es la reducción del plazo para la entrega de las tarjetas electrónicas, que pasó de 10 días hábiles a solo cinco días naturales. Este ajuste incrementa la presión operativa sobre el proveedor que resulte adjudicado.

La posible adjudicación a Broxel, de acuerdo con las mismas fuentes, podría implicar un riesgo operativo para la administración federal, debido a que el proceso exige la entrega de 800 mil tarjetas en un plazo de cinco días naturales en más de 2,100 puntos del país, lo que representa un reto logístico de alta complejidad.

A este desafío operativo se suma la presión financiera que implica adelantar recursos por más de 10 mil millones de pesos en un periodo muy reducido. Aunque la empresa ha participado en proyectos relevantes, actualmente mantiene compromisos de gran volumen, entre ellos los vales de despensa del Gobierno de la Ciudad de México y otros procesos federales recurrentes.

Las fuentes consultadas advierten que una falla en la entrega o dispersión de estos apoyos tendría un impacto inmediato sobre cientos de miles de trabajadores federales que esperan sus vales de despensa de fin de año, además de generar afectaciones operativas en más de 200 dependencias gubernamentales.

Especialistas señalaron que los tiempos tan reducidos incrementan la posibilidad de errores en la personalización, distribución y activación de las tarjetas. En un proceso de esta escala, cualquier desajuste puede derivar en reclamaciones masivas, costos adicionales para la autoridad y un deterioro en la confianza institucional.